El vaginismo es una disfunción sexual femenina frecuente. Se produce como una reacción de espasmo frente a los intentos de penetración que impide el coito, y sume a la pareja en la frustración. Superarlo es posible, y se recomienda confirmarlo mediante un test específico y la visita a un especialista.
Con la educación sexual que le brinda nuestra web puede comenzar a superar el vaginismo si sigue las pautas recomendadas con disciplina y persistencia, pues han sido diseñadas para mejorar la funcionalidad de la vagina y facilitar el disfrute de encuentros completos y satisfactorios.
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Qué es el Vaginismo
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El vaginismo es una de las más frecuentes disfunciones sexuales femeninas, cuya prevalencia oscila entre el 2 y el 25% de las mujeres según las series de las investigaciones epidemiológicas más importantes realizadas hasta la actualidad.
Hoy en día, la respuesta contráctil de la vagina al intento de penetración se engloba dentro del nuevo concepto del trastorno del dolor genito-pélvico/penetración, como una de sus posibles manifestaciones.
Sin embargo, algunos autores diferencian el vaginismo no asociado a dolor, y lo definen como un trastorno de origen fóbico.
De hecho, se ha comprobado como las mujeres con dispareunia (dolor a la penetración) suelen continuar con una vida sexual activa a pesar del dolor, mientras que aquellas que sufren vaginismo tienden a evitar los encuentros.
Al impedir solo la penetración y no afectar a otras modalidades de actividad sexual, puede pasar desapercibido en parejas que practican una sexualidad sin coito, hasta el momento en que desean procrear, que es cuando confrontan el problema.
Este hecho hace que existan dos picos de incidencia: uno en mujeres jóvenes –vírgenes que inician su vida sexual-, y otro alrededor de los 30 años -en féminas que desean ser madres por primera vez-.
Causas
La causa es casi siempre psicógena, pero hay que descartar patología orgánica, presente en alrededor de una de cada 10 mujeres afectadas por esta disfunción sexual.
- Factores psicológicos: educación sexual inadecuada, mala socialización del control de esfínteres, miedo al embarazo, agresiones sexuales o maltrato, experiencias sexuales previas fallidas, problemas de autoimagen, autoobservación, dedicación exhaustiva a la pareja para compensar el déficit, crisis afectiva grave, etc.
- Factores orgánicos: Endometriosis, rigidez del himen, alteraciones de los ligamentos de útero vejiga o recto, inflamación de la pelvis, tumores pélvicos, hemorroides o estenosis vaginal.
Para diagnosticar correctamente el vaginismo es imprescindible una exploración física. El tratamiento más efectivo -una vez descartadas las posibles causas orgánicas- es la terapia sexual mediante una desensibilización sistemática, entrenamiento dirigido individual y reestructuración de las creencias irracionales.
Superar el Vaginismo
Proporcionamos educación sexual de alto impacto con los mejores métodos para mejorar la funcionalidad vaginal y facilitar una respuesta sexual sana, natural y satisfactoria.
He aquí unas pautas básicas y muy útiles para empezar a mejorar desde ya: claves destinadas a desbloquear su vagina para superar el vaginismo y lograr un coito normal:
Confirmar el problema
Previo a cualquier medida terapéutica se sugiere una autoevaluación inicial con uno de nuestros cuestionarios científicos: test para detectar vaginismo.
El resultado es orientativo. El diagnóstico de cualquier disfunción sexual precisa de un profesional cualificado.
Base de conocimiento
Saber qué le ocurre y porqué es muy útil y a veces necesario para llegar a la solución del trastorno. Elija fuentes bibliográficas de calidad y no se crea todo lo que se publica en Internet.
Suscribirse a nuestra Newsletter selectivamente a los temas de su interés es una buena manera de informarse y acceder a información fiable y de calidad.
Disciplina
Cuando se sufre vaginismo son muy importantes la motivación y la disciplina. Adherirse a un programa terapéutico confiable y seguro y seguir las instrucciones con regularidad facilita una pronta solución del problema que, en la mayoría de los casos, tiene un origen psicológico.
Desbloqueo emocional
Para desbloquear la vagina es fundamental realizar una profunda introspección. dedique un tiempo diario a revivir los pensamientos y emociones que usted experimenta cuando su pareja le propone mantener un encuentro, y cómo van cambiando al acercarse el momento de la penetración.
Investigue los eventos del pasado que pueden haberle predispuesto a padecer el bloqueo: episodios de abuso sexual, educación sexual estricta, agresiones, interacción inadecuada con el sexo masculino, etc.
No supere un tiempo diario de más de 15 minutos. Sea paciente y perseverante, y analice los resultados de su introspección con la ayuda de su pareja, o mejor aún: con un/a terapeuta sexual.
Explorarse
Autoexplórese sin miedo. Para ello ha de contar con un espejo. Dedique unos minutos todos los días a explorar su vagina. Obsérvela por fuera y ábrala para mirar hacia el interior.
Familiarícese con ella, y tómela cariño. Realícelo con y sin la compañía de tu pareja. Primero a solas y después con su pareja.
Relajar la pelvis
Un estado excesivo de tensión de la pelvis predispone al bloqueo vaginal. Relaje y libere el suelo pélvico.
Conviene comenzar a tomar conciencia de esta musculatura y a ejercitarla con regularidad mediante ejercicios de contracción y relajación.
Puede hacerlo con la ayuda de un Kit para el vaginismo de la prestigiosa web especializada Vaginismus.com.
Superar miedos
Amar y confiar en la pareja es necesario para el éxito. Su apoyo incondicional dentro de un contexto de compromiso y estabilidad es fundamental para resolver la disfunción rápidamente y para siempre.
Téngalo muy en cuenta: el origen de los fracasos suele estar en el incumplimiento de esta premisa.
Un caso de éxito
Hola a todas. Yo padezco de vaginismo desde siempre, y un día acudí con mi esposo a una sexóloga. Esta me mandó los ejercicios de Kegel, e introducirme objetos pequeños dentro de mi vagina para ir superando ese miedo al dolor.
Nos llevó mucho tiempo y muchas frustraciones. Pero un día, movida por mi gran deseo de ser madre “me puse las pilas”, y me compré un juguete erótico en forma de pene de tamaño mediano.
Además de realizar a solas mis ejercicios de relajación (súper importantes), poner música relajante, y respirar profundo durante cinco minutos, comencé a intentar penetrarme con el pene mediano ayudada de un gel vaginal.
Al principio entró sólo la punta, pero seguí practicando todos los días dos veces hasta que logré penetrarlo por completo sin sentir ningún dolor. (Pude comprobar que es muy importante estar muy relajada y tranquila).
Después de este logro mi esposo comenzó a intentar penetrarme con el pene que compramos para que sintiese confianza, pero me costaba un poco. Tras conseguirlo, lo intenté con otro pene de mayor tamaño, y poco a poco lo fui consiguiendo.
El día que decidimos empezar a mantener relaciones para tener descendencia, hicimos ejercicios de relajación, pusimos música suave, y respiramos profundamente.
Me introduje el pene mediano primero, y luego el de mi esposo bien lubricado. Intentamos la penetración y ¡Sí funcionó! Lo logramos casi sin dolor, y ahora tenemos una niña hermosa de 3 años.
Espero que les sirva mi experiencia. A los 38 años fui madre. Costó, pero el deseo de superar un problema para lograr algo así es muy fuerte. Lo que si sufría eran las citologías vaginales.
Depende de quien te lo haga; siempre hacía saber mi situación para que fueran más delicadas a la hora de hacer el estudio, pero no siempre funcionaba.
Me despido deseándoles a todas esas mujeres con vaginismo que luchen por romper esas barreras. ¡Suerte!
Mujeres con vaginismo
Historias reales que le permitirán identificarse y obtener claves importantes para resolver su trastorno.
Tengo vaginismo. No sé qué hacer
Soy una chica joven y estoy verdaderamente preocupada con lo que me pasa. He estado informándome a través de esta y otras webs de sexualidad, y creo que padezco vaginismo.
Desde hace varios años tengo una relación con un chico, aunque no muy estable y seria, y hemos intentado en numerosas ocasiones mantener relaciones sexuales con coito, pero no soy capaz porque, sin saber por qué, me pongo nerviosa y «me cierro», y es imposible que se produzca la penetración.
Además, tampoco puedo hacer uso de tampones, pues no logro introducirlos en la vagina.
No he sufrido ningún suceso traumático ni nada similar y no tengo miedo a la penetración (o eso creo); y me gustaría muchísimo poder disfrutar de una vida sexual satisfactoria, y superar esto para sentirme mejor conmigo misma.
Me encuentro muy triste y decaída por esta situación, así que no quiero dejar que pase más tiempo sin buscar solución a este problema pero, por otro lado, me siento muy avergonzada y no encuentro la manera de contar lo que me ocurre.
Se lo he contado a alguna amiga, pero dicen que sólo serán nervios y falta de práctica, pero yo estoy casi convencida de que no es así.
Estoy barajando seriamente la opción de visitar al ginecólogo pero aún no he ido nunca y me da mucho reparo.
Por favor, me gustaría que me dieran una respuesta para saber qué podría ser lo que tengo y, sobre todo, si tiene fácil solución.
¿Qué es lo más recomendable en estos casos? Muchas gracias por la atención. Un saludo.
No me entra ni un dedo
Tengo 18 años, y sufro un serio problema en cuanto a la penetración, no sé ni siquiera si podría llegar a tratarse del vaginismo, y si es así, no entiendo por qué me ocurre a mí.
Me lleva pasando desde siempre, empecé con la masturbación hace unos años y nunca conseguí meterme ni siquiera la punta del dedo índice, me dolía muchísimo.
Dejé la masturbación por frustración y no volví meterme en el tema sexual hasta el año pasado.
Empecé a salir con un chico y en el momento en el que nos vimos listos quisimos probar la penetración, pero no había manera.
Me dolía el más mínimo intento de penetración y me sentí fatal conmigo misma.
Mi pareja me animó y me dijo que seguiríamos intentándolo. Llevamos más de un año así, yo estoy muy frustrada, ha habido progreso, pero muy poco, como mucho ahora entra una falange, pero nada más, y olvídate de meter dos dedos.
He intentado usar dilatadores progresivos caseros y aun así me cuesta muchísimo.
No sé qué más hacer. ¿Tendré vaginismo? ¿Será otra causa? ¿Cómo puedo identificar el problema sin acudir a un ginecólogo/sexólogo?
Recurrí a esta página porque estoy desesperada, mi madre no me dejará acudir a ningún experto por mis problemas, para ella la masturbación y esos temas son algo tabú, no puedo hacerla cambiar de opinión.
Creo que tengo vaginismo
Tengo 20 años y tuve una relación de más de cuatro años. A pesar de haberlo intentado muchas veces, nunca logramos llegar a la penetración, ya que tenía miedo al dolor y cuando lo intentábamos no era posible que entrara.
Lamentablemente, esta relación terminó y con mayor razón me preocupa la situación, ya que siento que si no pude con mi pareja de tanto tiempo y que amaba, no creo que vaya a poder con otra persona, lo que me provoca temor de volver a tener otra pareja y explicarle mi problema.
Buscando por Internet conocí la enfermedad del vaginismo y creo que la padezco, aunque no estoy segura puesto que no soy profesional en el tema para diagnosticarme, es por eso que he pedido su ayuda.
¿Es vaginismo? Sí es así ¿Qué debo hacer? Por favor, me urge solucionarlo, esto me ha traído problemas de inseguridad y autoestima. Muchas gracias.