La eyaculación precoz es la disfunción sexual más prevalente en hombres, aunque su abordaje clínico es menos frecuente debido a la falta de opciones farmacológicas tan efectivas como las disponibles para otras disfunciones, como la disfunción eréctil.
Sin embargo, estrategias naturales respaldadas por evidencia científica pueden ofrecer resultados significativos. Te recomiendo hacer este test de autoevaluación antes y después de practicar.
Este artículo detalla siete técnicas prácticas y un método adicional basado en terapia sexual y prácticas somáticas.
¿Qué encontrará aquí?
Retrasar la Eyaculación | 7 ideas prácticas
Durar más en la cama es más fácil si aplicas los siguientes consejos basados en la evidencia científica o la práctica habitual de los especialistas en sexología.
1. Fortalecimiento y Relajación del Suelo Pélvico
Un suelo pélvico fortalecido pero relajado es fundamental para el control eyaculatorio.
La hipertonicidad del periné puede ser contraproducente, por lo que se recomienda combinar ejercicios de Kegel con técnicas de relajación, como la postura de yoga «niño feliz» o la posición de cuclillas.
La supervisión por un fisioterapeuta especializado es aconsejable para evitar el síndrome del suelo pélvico hipertónico.
2. Modificación de Hábitos Neuroestimulantes
La ingesta de sustancias excitantes como cafeína, teína, alcohol o estupefacientes puede exacerbar la ansiedad y reducir el control eyaculatorio, especialmente en individuos con metabolismo lento de cafeína o predisposición nerviosa.
Se recomienda evitar estos estimulantes, particularmente en días previos a encuentros sexuales.
3. Selección de Pareja Compatible
La estabilidad emocional y la confianza en la pareja son factores críticos. Encuentros esporádicos, caracterizados por novedad y desconfianza, aumentan la ansiedad y reducen la capacidad de control eyaculatorio.
Una relación estable favorece un entorno psicológico óptimo para la aplicación de estas técnicas.
4. Optimización de la Frecuencia Eyaculatoria
Existe una correlación entre la frecuencia eyaculatoria y el control del orgasmo. La eyaculación excesiva puede debilitar la fuerza eréctil, mientras que la abstinencia prolongada puede generar ansiedad, un factor que precipita la eyaculación precoz. Se recomienda identificar una frecuencia individualizada que equilibre estos extremos.
5. Mejora de la Calidad Erectora
La relación entre la calidad de la erección y el control eyaculatorio es bidireccional. Una erección satisfactoria con baja excitación permite mayor margen hasta el punto de no retorno.
Por el contrario, una erección que requiere alta estimulación acerca al individuo al orgasmo prematuro.
Terapias para mejorar la potencia sexual pueden ser complementarias. Para mejorar este aspecto te recomiendo el Videocurso Aumenta tu Potencia Sexual en 5 Pasos Sencillos, recientemente actualizado.
6. Técnicas de Redirección Atencional
Durante el coito, la redirección de la atención a estímulos no sexuales (ej., respiración de la pareja, texturas del entorno) puede reducir la excitación y alejar del punto de no retorno.
Esta técnica, derivada de la terapia sexual cognitivo-conductual, se combina con la ralentización de movimientos para maximizar su efectividad.
7. Integración de Técnicas Respiratorias (Pranayama)
El Pranayama, una técnica respiratoria avalada por estudios científicos, mejora el control autonómico y reduce la excitación.
Su práctica regular, tanto fuera como durante el acto sexual, permite modular la respuesta fisiológica sin comprometer la erección.
Bonus: Abordaje sin Masturbación
Contrario a algunos enfoques terapéuticos, se propone evitar la masturbación como método de entrenamiento.
Alternativas como la «estimulación paradójica» (lograr erecciones sin excitación erótica) pueden ser más efectivas para practicar técnicas como «Parada y Arranque». La tienes explicada en detalle en el libro Más Control y Potencia Sexual.
Conclusión
Estas estrategias, basadas en evidencia clínica y respaldadas por principios de terapia sexual, ofrecen un abordaje integral para el control eyaculatorio.
La combinación de fortalecimiento pélvico, modificación conductual y técnicas somáticas puede proporcionar resultados significativos sin necesidad de intervención farmacológica.